Desde antes del pasado miércoles, estudiantes de distintas universidades han tomado o se preparan para tomar más de 70 sedes en todo el país. Este fin de semana, varias facultades de la Universidad de Buenos Aires, como Filosofía y Letras, Psicología, Sociales, Exactas, Arquitectura y Veterinaria, se encontraban ocupadas. Otras universidades también realizaban asambleas, mayormente autoconvocadas, donde se discutía la posibilidad de ocupación, incluyendo la Universidad Nacional de las Artes (UNA).

   En la Universidad de La Plata, el Rectorado estaba tomado, y en el conurbano, muchas universidades, como la Universidad de La Matanza, experimentaban ocupaciones por primera vez. Universidades de Avellaneda, Moreno, José C. Paz, Sarmiento, Lanús, Lomas de Zamora y San Martín también se sumaban a esta ola, con asambleas masivas. Además, había ocupaciones en Bahía Blanca, Mar del Plata y Tandil (Universidad Nacional del Centro).
   En la Universidad Nacional de Córdoba, el clima asambleario y de ocupaciones se intensificó, abarcando las facultades de Psicología, Sociales, Filosofía y Comunicación, entre otras. La toma temprana de la facultad de Psicología en la Universidad Nacional de Rosario se replicó en varias facultades adicionales. Estas acciones se han extendido a universidades nacionales en San Luis, Jujuy, Tucumán, Salta, San Juan, Entre Ríos, Catamarca, Misiones, Río Gallegos y La Pampa.

   La política económica del gobierno de Milei, junto con los partidos que lo respaldan, ha resultado en una reducción salarial del 50% para docentes y no docentes. Esta situación refleja la realidad de los estudiantes, más de la mitad de los cuales se encuentran en situación de pobreza.
   El movimiento de ocupaciones busca defender la Universidad "contra los ataques del gobierno y la inacción de una estructura político-institucional que colabora, activa o pasivamente, en la guerra contra la clase trabajadora", como se señala en un manifiesto leído en la facultad de Sociología de Buenos Aires. 

   Asimismo, los estudiantes denunciaron a "los rectores y sus fuerzas políticas, que han sido los principales promotores del ‘acuerdo’ con el gobierno, impulsando negociaciones infructuosas como el arancelamiento a estudiantes extranjeros, recortes en carreras y reducciones salariales a docentes y no docentes. Esta estrategia ha llevado al movimiento en defensa de la Universidad Pública y Gratuita a un callejón sin salida en el Parlamento, y ahora intentan llevarnos a discutir el presupuesto de 2025, que es otra vía muerta", declararon los estudiantes.
Fuente: diarionorte.com