El retiro prácticamente total del Estado de actividades otrora esenciales como la obra pública genera un impacto inconmensurable en los más diversos sectores, pero en no todos se evidencian de manera tan explícita como en el estado de las rutas.
Si bien desde Vialidad Nacional informaron en las últimas horas sobre trabajos en marcha en algunos tramos del interior, transitar la autovía de la ruta 16, en especial el sector que circunda el área metropolitana, se ha convertido en un trastorno.
El problema no es menor y la paradoja es que el peaje se sigue cobrando. El tramo "metropolitano" son unos ocho kilómetros que unen la bajada del puente General Belgrano con el acceso Oeste de Resistencia, donde los parches (que ya están en mal estado), los baches y las banquinas en mal estado se transforman en las postales predominantes.
La privatización en marcha de la empresa Corredores Viales agrega más incertidumbre. De hecho, los trabajadores realizaron una medida de fuerza, hace algunas semanas, pero el reclamo fue muy difícil de canalizar porque no existe una "autoridad con poder de decisión" en esta parte del país.
En este escenario cuasi dantesco, el riesgo para los miles de conductores que circulan por el viaducto es palpable. Es importante recordar que, según los registros oficiales, por la zona pasan, diariamente, cerca de 25.000 vehículos de todo tipo.
Fuente: diarionorte.com