En el Día de la Madre Tierra o Día de la Pachamama, un año más se realizó el tradicional ritual de homenaje, en el Patio del "Indio" Froilán. Se trata de una tradición cultural que se celebra en todo el Noroeste del país, y en la provincia, ya se convirtió en una costumbre cargada de significado, que se repite desde el 2008, ante la presencia de decenas de personas que se autoconvocan en este espacio para protagonizar el momento.
En diálogo con EL LIBERAL, Teresa Castronuovo destacó la importancia de este ritual.
"Un año más rendimos este culto que se merece nuestra Pacha, Nuestra Tierra, en el Patio. Es un ritual que lo hemos tomado como propio, como de toda la Argentina. Lamentablemente han ido surgiendo ideas de que es solamente del norte o del Perú. Ellos han tenido la posibilidad y la capacidad de poner en valor con el tiempo o sea que la resistencia cultural ha quedado en la voz de nuestros ancestros, que nos han contado y puesto en valor este ritual y nos ha permitido que volvamos a hacerlo. Es algo maravilloso este acto de rendirle un homenaje a la Pacha y darle de comer en estos tiempos en los que se empieza a sembrar en el norte, con el objetivo de ver los frutos en octubre", reflexionó Tere, al tiempo que resaltó la necesidad del agradecimiento.
"Es también devolverle a la pacha lo que nos da", manifestó.
Asimismo recordó que se empezó con la práctica en el 2008 con un grupo de amigos de Jujuy. Y desde entonces, las emociones son cada vez más grandes.
El Patio del "Indio" Froilán es más que un simple espacio: es reencuentro, emoción y sentimiento
"Tenemos protecciones especiales aquí. Hace varios años ya vino una pareja que había venido a Santiago a la Fiesta de la Abuela Carabajal y el domingo siguiente vinieron al Patio y se conocieron aquí. Se fueron a vivir juntos. A los dos años cuando vuelven nos cuentan que habían tenido un hijo, Santiago y por una cardiopatía se murió. Fue cremado y habían decidido traer sus cenizas al lugar en donde había nacido su amor. Por lo tanto, desde ese momento, los restos del pequeño están en el Patio y sabemos que se trata de una hermosa protección que tenemos", contó aún emocionada Tere Castronuevo.
También recuerda que un niño dijo haber hablado con una persona que había fallecido hace un tiempo y que, sin embargo él no lo sabía. La sorpresa fue cuando el pequeño le contó a la hija de este hombre, generando un momento de gran emoción y sentimientos a flor de piel.
Por esto, y por las incontables vivencias que encierra el Patio es que este ritual en este escenario es más que merecido, señaló.
 Fuente: El Liberal