Su incursión en el vóley comenzó a los 9 años, durante unas vacaciones en la capital santiagueña, donde asistió a una escuelita de verano en Mitre Vóley. Apenas comenzó, su talento fue detectado y rápidamente la invitaron a unirse al equipo sub-13. Jugó sus primeros partidos a esa temprana edad, y también practicaba de manera recreativa en Pampa de los Guanacos, su ciudad natal, en las clases de educación física de su padre, profesor en la localidad, y en el polideportivo local.
A los 13 años, mientras participaba en una liga libre en Pampa del Infierno, Chaco fue observada por cazatalentos y fichada por la Sociedad Italiana de Charata.
Ese mismo año, integró la selección sub-13 de Santiago del Estero, y poco tiempo después, fue seleccionada para el equipo del Chaco, demostrando su versatilidad y compromiso. Durante ese período, viajaba todos los fines de semana desde Pampa de los Guanacos para competir, partiendo a las 5:00 a.m. y vendiendo postres para cubrir los costos de sus viajes.
En 2022, mientras cursaba el último año del secundario, Maia recibió una oferta del club Trébolense de Santa Fe, que la llevó a mudarse hacianallí. Con Trébolense, ese mismo año, consiguió consagrarse campeona en un torneo internacional en Brasil y fue elegida la mejor jugadora del torneo. Su desempeño le abrió nuevamente las puertas de la selección santiagueña.
En 2023, jugó la Liga Federal con Ateneo de Santiago del Estero y luego se trasladó a San Guillermo, Santa Fe, donde vivió un año. Allí, fue seleccionada por el equipo sub-18 de Santa Fe, con el cual se coronó campeona argentina. Paralelamente, con Unión de San Guillermo, obtuvo la medalla de bronce en el Torneo Argentino sub-18.
Ya en 2024, firmó con la Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM), comenzando el año en Buenos Aires y jugando su primera Liga Nacional. Sin embargo, en abril, llegó una oferta inesperada: la Universidad de Oklahoma, en Estados Unidos, la invitó a unirse a sus filas. Una excompañera de la Sociedad Italiana de Charata recomendó a Maia, y desde Estados Unidos comenzaron a solicitar material sobre su desempeño. Sin dudarlo, Maia aceptó la propuesta y se mudó a Oklahoma.
Hoy, un mes después de su llegada, Maia Rubio ya es titular del equipo de la universidad, que por primera vez se encuentra en el top 10 del ranking nacional, ocupando el sexto lugar. El talento y dedicación de Maia siguen sorprendiendo, y su futuro en el vóley promete ser brillante. Esta joven, orgullo de Pampa de los Guanacos y del vóley argentino, parece no tener techo en su carrera.
13-09-24 www. diariodigitalcopal.com.ar