Por supuesto, esta enojosa divergencia trata de la forma correcta de poner el papel higiénico en el dispensador: ¿debe hacerse con la hoja colgando hacia adelante o hacia atrás? Esta es una de las innumerables incógnitas que envuelven el uso correcto de un artilugio de uso tan cotidiano (para quienes disfrutan de un tránsito promedio).
   Las opiniones respecto de esta situación están sumamente divididas: por un lado, los que afirman que la hoja que ofrece el papel higiénico debe ponerse siempre hacia el frente, es decir, que debe colgar hacia adelante. La otra parte de las opiniones defienden que la forma correcta es que el papel caiga hacia atrás, en otras palabras, que quede colgando hacia la pared.
   Esta falsa antinomia que ha acaparado el debate público y privado durante tanto tiempo, finalmente ha caído tras el hallazgo de una contundente evidencia que revela de una vez y para siempre la forma correcta de colocar el papel higiénico en el despachador.
   Y no es solo una indicación terminante la que arroja luz sobre aquella penosa situación, sino que hay multitud de testimonios documentales que confirman cómo debe realizarse el procedimiento. 
   Es curioso que la respuesta fundamentada estuviera tantos años fuera de nuestro alcance, cuando reposaba guardada en la seguridad de las oficinas de patentes que describen productos iguales o parecidos al popular papel higiénico.
Patente Wrappin o toiler paper roll   Ofrece una gráfica y detallada explicación del invento de Seth Wheeler, patentado en 1891: el rollo de papel con divisiones puntuadas para su fácil y recta separación. La patente en sí no refiere a la forma correcta de colocar el papel higiénico, pero muestra un diagrama con el que da como un hecho de establecido por la práctica consuetudinaria que el papel debe ser puesto hacia el frente.
Manufacture of wrapping-paper
   La patente nombrada en el punto anterior lo daba como un hecho establecido, porque otra patente registrada por Wheeler ocho años antes mostraba otro invento parecido a un rollo de papel higiénico, un tubo de papel resistente, cuya función era facilitar el enrollado del papel de forma sencilla si fuera necesario. Nuevamente, un minucioso diagrama muestra el papel puesto con las hojas hacia el frente.
Papel perforado
   Esta tercera patente, obtenida por el señor Howard Hicks en 1889, describe el rollo de papel con perforaciones puntuadas, parecido al de Wheeler, con la diferencia de que las separaciones entregan son trozos triangulares. Una vez más, las imágenes descriptivas presentan el papel de baño ofreciéndose con sus hojuelas al frente. La patente de Hicks no triunfó en los baños, pero llegó más lejos: su forma de puntuar las separaciones en el papel se aplicó en otros documentos como cheques o faxes. 
   El conjunto de la documentación que ofrecemos constituye un testimonio completo e irrebatible de que el papel higiénico debe ponerse en el portarrollos con las hojas hacia el frente. 
   Por si hicieran falta más argumentos, agreguemos las decisivas condiciones de salubridad que se ponen en riesgo: si el papel es colocado hacia el lado de la pared, el roce constante del mismo con la misma (mampostería y/o azulejado del baño) puede eventualmente contaminarlo. Para más gloria, el papel colgando hacia atrás facilita que caiga en exceso y toque el suelo. Y otrosí: el contacto de nuestras manos con la pared también será más frecuente con el papel hacia atrás.
   Por todas estas situaciones que pueden poner en riesgo tu salud y con la información obtenida de documentos específicos, estamos en condiciones de asegurar de una vez y para siempre que la forma correcta de poner el papel higiénico en el dispensador es con las hojas hacia el frente.
Fuente: diarionorte.com